Iba manejando por la carretera y no sé por qué estaba observando el camellón de en medio, en eso alcanzo a notar a un perrito dentro de una alcantarilla. Me quedé con angustia pero no pude hacer nada en ese momento, porque traía a mi bebé de dos meses y era prácticamente imposible pararse.
Al día siguiente, no podía estar tranquila y le pedí a una amiga que me acompañara ya con todo lo necesario por si lo encontraba. Llegamos a la zona y no lo vimos, decidimos bajarnos y cruzar la carretera y al asomarnos ahí estaba. Un perrito mojado y asustado dentro de la alcantarilla, no se podía mover pero se emocionó al vernos, lloraba y hasta nos daba besitos.
Fue llevado al veterinario para que fuera bañado y revisado, ya que estaba lleno de pulgas y garrapatas.
Le hicieron una radiografía y vieron que tenía el fémur fuera de su lugar y los tendones rotos, así como también una infección en los oídos. Santiago será operado para que pronto pueda volver a caminar.
Cada producto vendido otorga una semana de alimento para un perrito Santiago.
texto redactado por su rescatista: Marcela Siller.